martes, 5 de junio de 2018

Chauchesco prepara la pira 
Su último acto de
Desobediencia y protesta
Contra el sistema
Capitalista-cristiano.

Su sangre inflamable
Levanta temperatura
Y la luz de las llamas
Iluminan todo Buenos Aires.

El espíritu eterno lúcido
Que retorna nuevamente.

El viejo permanece sereno
Envuelto en sus propias llamas
En su propia luz
En su propio destino y propósito.

Su mirada permanece serena
En todo momento.

Separé las cenizas de su corazón
Intacto;
Lo tomé y lo llevé conmigo.

Su corazón reposa en mi mesa
Junto a mis libros y notas. Es  el tesoro
Más importante de mi vida.

Sé que algo nos ató y nos ata
Sé que el universo necesita de
Este vínculo y estos versos.
Sé que algún día volveremos a ver.




















































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