Mamá, hoy escuché a Bob Dylan
Y su poesía me llegó hasta el alma.
Decía que estaba Golpeando las puertas del cielo
Y yo ahora me siento así.
Te pido que tirés mis fierros
Ya no voy a dispararlos más
Ya no voy a lastimar a nadie
No voy a escruchar más casas
Ni arrastrar viejas a la salida del banco
Para robarles la jubilación.
Ya no más salideras
Ni entraderas
Ni vender gilada
Ni andar amanecido semanas enteras.
Mamá, Bob Dylan me habló en una canción
Por eso te pido esto
Su poesía me llegó hasta el alma.
¿Por qué papá puso un fierro en mi mano
Y no un libro de poesía?
Tanto daño se hubiera evitado.
Mamá, estoy Golpeando las puertas del cielo
Mientras mi sangre
Mancha la sábana y la camilla
Y el piso de la sala de urgencia.
Mamá, voy a reunirme con la abuela
Y tus perras.
Bob me está llamando
Está llegando el tren
Las nubes negras están bajando.
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