martes, 27 de julio de 2021

Serotonina

Tuve suerte
Al habitar un cuerpo carente 
De dopamina y serotonina.
Tuve que suplir esa carencia 
De manera artificial
Hasta que fue suficiente.


Tuve la suerte
De ser educado en la calle 
Por hombres que no estaban 
Distraídos por abstracciones.

Cuando volví a casa 
Mi madre me enseñó 
El arte de la economía.
También el de la retórica
Y la oratoria.

Mi padre me dio los yeites 
Para ser un vendedor eficiente.

Recuperé de mis abuelos 
Filósofos báquicos 
La poesía y filosofía 
Como estilo de vida.

De mis tíos 
La disciplina del trabajo 
Y el hábito de la lectura.

Mis tías me enseñaron a cocinar 
A hacer arroz con leche, guisos
Pucheros y tortillas.

Mi abuela me asignó 
Un destino en el pan casero.

Mis amigos me dieron las frases 
Más célebres de mi vida.

Tuve suerte de conocer la miseria 
La delincuencia, la locura y la desesperación
Que bueno que soy una persona mala
Esto me obliga a practicar 
La espiritualidad de manera seria 
Hoy me ahorro muchas discusiones 
Con la policía de la moral
Y los santurrones de cartón.

La luna sigue rodando sobre mí 
Es la misma que me acompaña 
Desde que jugaba en la terraza 
De la casa de mi abuela.

Hay aromas a lluvia que se funden 
Con los eucaliptus. Las liebres corren
Por el barrio y una lechuza con su grito
Eleva mis niveles de dopamina y serotonina.

Sigo siendo afortunado. 





 

Serotonina

Tuve suerte
Al habitar un cuerpo carente 
De dopamina y serotonina.
Tuve que suplir esa carencia 
De manera artificial
Hasta que fue suficiente.


Tuve la suerte
De ser educado en la calle 
Por hombres que no estaban 
Distraídos por abstracciones.

Cuando volví a casa 
Mi madre me enseñó 
El arte de la economía.
También el de la retórica
Y la oratoria.

Mi padre me dio los yeites 
Para ser un vendedor eficiente.

Recuperé de mis abuelos 
Filósofos báquicos 
La poesía y filosofía 
Como estilo de vida.

De mis tíos 
La disciplina del trabajo 
Y el hábito de la lectura.

Mis tías me enseñaron a cocinar 
A hacer arroz con leche, guisos
Pucheros y tortillas.

Mi abuela me asignó 
Un destino en el pan casero.

Mis amigos me dieron las frases 
Más célebres de mi vida.

Tuve suerte de conocer la miseria 
La delincuencia, la locura y la desesperación
Que bueno que soy una persona mala
Esto me obliga a practicar 
La espiritualidad de manera seria 
Hoy me ahorro muchas discusiones 
Con la policía de la moral
Y los santurrones de cartón.

La luna sigue rodando sobre mí 
Es la misma que me acompaña 
Desde que jugaba en la terraza 
De la casa de mi abuela.

Hay aromas a lluvia que se funden 
Con los eucaliptus. Las liebres corren
Por el barrio y una lechuza con su grito
Eleva mis niveles de dopamina y serotonina.

Sigo siendo afortunado. 





 

jueves, 22 de julio de 2021

El Estado paga el viaje 

Hasta el triángulo de Bernal.


El traslado se hace por la avenida Mitre.


La luz verde del semáforo 

Hace detener al patrullero 

Y al auto de un asalariado.


El asalariado mira a los negritos 

Que van esposados en la parte de atrás.


El movimiento de sus labios dice:

Estos negros de mierda.


El infierno es la mirada del otro

Y las horas de calabozo 

Y el médico forense 

Y los antecedentes 

Y recuperar la libertad 

Y ponerse los cordones 

En la vereda de la taquería 

Y la gente que pasa

Y el movimiento de sus pensamientos dice:

Estos negros de mierda. 




El Estado paga el viaje 

Hasta el triángulo de Bernal.


El traslado se hace por la avenida Mitre.


La luz verde del semáforo 

Hace detener al patrullero 

Y al auto de un asalariado.


El asalariado mira a los negritos 

Que van esposados en la parte de atrás.


El movimiento de sus labios dice:

Estos negros de mierda.


El infierno es la mirada del otro

Y las horas de calabozo 

Y el médico forense 

Y los antecedentes 

Y recuperar la libertad 

Y ponerse los cordones 

En la vereda de la taquería 

Y la gente que pasa

Y el movimiento de sus pensamientos dice:

Estos negros de mierda. 




lunes, 19 de julio de 2021

Cada vez que pienso en poesía

 


Cada vez que pienso en poesía
No pienso en Vallejo, el Arcipreste de Hita
Calderón de la Barca, Machado
Neruda, Gelman
Olga o Alejandra.
Ni siquiera pienso en la carrera de Letras
O Filosofía.
No pienso en libros, editoriales
O recitales.
No.
Pienso en esa poética bastarda, sucia
Alejada de las garras de la academia
Y del Estado.
Una vez bajamos del 70
En Iriarte y Luna.
Ya en la primera cuadra
Nos ofrecieron tiros.
La Karina no tenía
Y fuimos a ver al Chino a la canchita.
En la capilla de la Virgen de Caacupé
Celebraban un bautismo
Y en la esquina pintaron guantes
Con unos giles.
Cruzando el riachuelo
Que hace de frontera
Entre Avellaneda y Capital
El Chaco se armó la pipa.
Y en el paredoncito de la sociedad de fomento
Pude ver como el encendedor
Quemaba la piedra
Y él desaparecía por el caño
Y el humo lo elevaba sobre los árboles
Y al llegar a las primeras nubes
El velo de la realidad
Se volvía un calidoscopio tornasolado.
Todo ocurría en 10 minutos
Que entraban en 4 segundos.
Luego caía el patrullero
Buscando antecedentes
Mientras unos perros
Rompían una bolsa de basura
Para buscar comida.



Cada vez que pienso en poesía

 


Cada vez que pienso en poesía
No pienso en Vallejo, el Arcipreste de Hita
Calderón de la Barca, Machado
Neruda, Gelman
Olga o Alejandra.
Ni siquiera pienso en la carrera de Letras
O Filosofía.
No pienso en libros, editoriales
O recitales.
No.
Pienso en esa poética bastarda, sucia
Alejada de las garras de la academia
Y del Estado.
Una vez bajamos del 70
En Iriarte y Luna.
Ya en la primera cuadra
Nos ofrecieron tiros.
La Karina no tenía
Y fuimos a ver al Chino a la canchita.
En la capilla de la Virgen de Caacupé
Celebraban un bautismo
Y en la esquina pintaron guantes
Con unos giles.
Cruzando el riachuelo
Que hace de frontera
Entre Avellaneda y Capital
El Chaco se armó la pipa.
Y en el paredoncito de la sociedad de fomento
Pude ver como el encendedor
Quemaba la piedra
Y él desaparecía por el caño
Y el humo lo elevaba sobre los árboles
Y al llegar a las primeras nubes
El velo de la realidad
Se volvía un calidoscopio tornasolado.
Todo ocurría en 10 minutos
Que entraban en 4 segundos.
Luego caía el patrullero
Buscando antecedentes
Mientras unos perros
Rompían una bolsa de basura
Para buscar comida.



Para qué sirve el Estado

 Leña, miel, huevos, aceite

Rosquitas, choripanes, papas
Todo cada 100 metros
Sobre la avenida Indiada.
Mientras los argentos ganan la avenida
Los chinos siguen agrandando el supermercado.
La harina sube
Y hay que aumentar el pan 20 pesos.
En el barrio
Una carnicería inagura
Pechito de cerdo y picada
Anuncia la pizarra.
Y discute con esas pizarras fascistas
Que te obligan a sonreír
A recordarte que viniste a ser feliz
Que sos pobre porque querés
Que hay que soltar
Cuando tenés el fierro en la cabeza
Y que hay que ser compasivo
Con los violadores, políticos y policías
Porque tuvieron una infancia difícil.
Entonces camino por las calles de tierra
Antes de que las asfalten;
Como a Cambaceres
Que la asfaltaron
Sin arreglar las cloacas
Y yo me pregunto
Para qué sirve el Estado
Mientras sueño
Con meter un pechito de cerdo
Con papas
Al horno de barro.

Para qué sirve el Estado

 Leña, miel, huevos, aceite

Rosquitas, choripanes, papas
Todo cada 100 metros
Sobre la avenida Indiada.
Mientras los argentos ganan la avenida
Los chinos siguen agrandando el supermercado.
La harina sube
Y hay que aumentar el pan 20 pesos.
En el barrio
Una carnicería inagura
Pechito de cerdo y picada
Anuncia la pizarra.
Y discute con esas pizarras fascistas
Que te obligan a sonreír
A recordarte que viniste a ser feliz
Que sos pobre porque querés
Que hay que soltar
Cuando tenés el fierro en la cabeza
Y que hay que ser compasivo
Con los violadores, políticos y policías
Porque tuvieron una infancia difícil.
Entonces camino por las calles de tierra
Antes de que las asfalten;
Como a Cambaceres
Que la asfaltaron
Sin arreglar las cloacas
Y yo me pregunto
Para qué sirve el Estado
Mientras sueño
Con meter un pechito de cerdo
Con papas
Al horno de barro.

El canto de las balas

 


Calor de verano
Y temperatura en aumento
Levantan el olor a aguas servidas
Del arroyito.


La tierra reseca, resquebrajada
El silencio de la siesta
Que también se desgarra
Por el canto de un ruiseñor.


Ese canto que se escuchó
Por primera vez
En los campos de Israel
Por Ruth, la moabita
Y que escuchó Ovidio
Shakespeare, Keats
Y Atahualpa en un partido de truco
En el campo
Mientras uno de los gauchos
Perdía la mano.


El canto atraviesa todo el terraplén
Mientras la sangre
Sale del pecho
Y tiñe de rojo el escudo de Banfield.


El rastrero corre con las zapatillas.


La bala que atravesó corazón y pulmón
También comienza a viajar por el tiempo
Así como el canto del ruiseñor
Así como la sangre roja
Que se mezcla con el verde
De la camiseta
Así como la ausencia del Estado
Por estos barrios
Así como el pinta de Banfield
Que antes de expirar
Encuentra su religión
Y el rastrero la pierde
Y nosotros desde la otra esquina
Que pasamos los días
Y las noches perdiendo la religión
Escuchando el canto del ruiseñor
Escuchando el canto de las balas.




El canto de las balas

 


Calor de verano
Y temperatura en aumento
Levantan el olor a aguas servidas
Del arroyito.


La tierra reseca, resquebrajada
El silencio de la siesta
Que también se desgarra
Por el canto de un ruiseñor.


Ese canto que se escuchó
Por primera vez
En los campos de Israel
Por Ruth, la moabita
Y que escuchó Ovidio
Shakespeare, Keats
Y Atahualpa en un partido de truco
En el campo
Mientras uno de los gauchos
Perdía la mano.


El canto atraviesa todo el terraplén
Mientras la sangre
Sale del pecho
Y tiñe de rojo el escudo de Banfield.


El rastrero corre con las zapatillas.


La bala que atravesó corazón y pulmón
También comienza a viajar por el tiempo
Así como el canto del ruiseñor
Así como la sangre roja
Que se mezcla con el verde
De la camiseta
Así como la ausencia del Estado
Por estos barrios
Así como el pinta de Banfield
Que antes de expirar
Encuentra su religión
Y el rastrero la pierde
Y nosotros desde la otra esquina
Que pasamos los días
Y las noches perdiendo la religión
Escuchando el canto del ruiseñor
Escuchando el canto de las balas.




Natalie Imbruglia

 


Era ella
Como Natalie Imbruglia
En ese video que se llama Torn
Y que bailaba
Mientras el decorado se caía a pedazos.
Era ella
Su vida como en ese video
Ella bailaba
Mientras su vida se caía a pedazos.
Recuerdo que era tan maldita
Como su belleza.
No le importaba pararse de manos
Con 3 o 4
Abrirse la vulva
Sacarse una navaja
Sacar la hoja de la navaja
Y abrirle vulvas a los giles
En la cara, frente, panza, antebrazo.
Era ella
Un bello tornado
Que arrasaba con pendejos
Y viejos
Los empastillaba
Y les afanábamos todo.
Era ella
Cantándole a un gordo violín
Que habíamos laburado
Y él amordazado
Y yo vaciando el departamento
Ella le cantaba:
"Nothing's fine, I'm torn
I'm all out of faith, this is how I feel
I'm cold and I am shamed
Lying naked on the floor."
Era ella
Sádica como Juliette Lewis
En Asesinos por naturaleza
Y autodestructiva
Como Amy Winehouse.
Era ella
En la bañera del telo
En donde la encontré.
Su sangre ya se había mezclado
Con el agua caliente.
Era ella
Diciéndome con su último aliento:
"Llegaste tarde, estoy hecha trizas
Ya perdí la fe."



Natalie Imbruglia

 


Era ella
Como Natalie Imbruglia
En ese video que se llama Torn
Y que bailaba
Mientras el decorado se caía a pedazos.
Era ella
Su vida como en ese video
Ella bailaba
Mientras su vida se caía a pedazos.
Recuerdo que era tan maldita
Como su belleza.
No le importaba pararse de manos
Con 3 o 4
Abrirse la vulva
Sacarse una navaja
Sacar la hoja de la navaja
Y abrirle vulvas a los giles
En la cara, frente, panza, antebrazo.
Era ella
Un bello tornado
Que arrasaba con pendejos
Y viejos
Los empastillaba
Y les afanábamos todo.
Era ella
Cantándole a un gordo violín
Que habíamos laburado
Y él amordazado
Y yo vaciando el departamento
Ella le cantaba:
"Nothing's fine, I'm torn
I'm all out of faith, this is how I feel
I'm cold and I am shamed
Lying naked on the floor."
Era ella
Sádica como Juliette Lewis
En Asesinos por naturaleza
Y autodestructiva
Como Amy Winehouse.
Era ella
En la bañera del telo
En donde la encontré.
Su sangre ya se había mezclado
Con el agua caliente.
Era ella
Diciéndome con su último aliento:
"Llegaste tarde, estoy hecha trizas
Ya perdí la fe."



Comprendo

El reparto del pan

Me lleva hacia la Villa Aeropuerto.

La voz de los baquianos tobas y guaraníes

Que me habitan

Me llevan por la huella que va

Del barrio Viajantes del Sur

A mi destino.

A mitad de camino

Un jinete con su caballo

Viene a mi encuentro.

Mientras la luz diáfana de la mañana

Nos ilumina a los dos

Una especulación Borgeana

Me llena de estupor el cerebro

Sobre estas huellas que transitaron

Puelches, vorogas, mapuches

Y las Conquistas del desierto.

Comprendo que soy parte de algo

Que ya debería saber

Comprendo que soy algo

Que todavía sigo buscando.







Comprendo

El reparto del pan

Me lleva hacia la Villa Aeropuerto.

La voz de los baquianos tobas y guaraníes

Que me habitan

Me llevan por la huella que va

Del barrio Viajantes del Sur

A mi destino.

A mitad de camino

Un jinete con su caballo

Viene a mi encuentro.

Mientras la luz diáfana de la mañana

Nos ilumina a los dos

Una especulación Borgeana

Me llena de estupor el cerebro

Sobre estas huellas que transitaron

Puelches, vorogas, mapuches

Y las Conquistas del desierto.

Comprendo que soy parte de algo

Que ya debería saber

Comprendo que soy algo

Que todavía sigo buscando.







Una navidad diferente

  “Cuando miras largo tiempo a un abismo, también éste mira dentro de ti” Friedrich Nietzsche        Pasó por la puerta principa...